miércoles, 20 de febrero de 2013

365 largos días, sin Facundo



Los funcionarios no funcionan.
Los políticos hablan pero no dicen.
Los votantes votan pero no eligen.
Los medios de información desinforman.
Los centros de enseñanza enseñan a ignorar.
Los jueces condenan a las víctimas.
Los militares están en guerra contra sus compatriotas.
Los policías no combaten los crímenes, porque están ocupados en cometerlos.
Las bancarrotas se socializan, las ganancias se privatizan.
Es más libre el dinero que la gente.
La gente está al servicio de las cosas.

Eduardo Galeano, El libro de los abrazos (1989)

Por Alexis Rasftopolo

Imágenes: gentileza, Prensa Mov. Evita

<A un año de la desaparición nos encontramos aquí reunidos con más fuerza que nunca, porque unidos es la única forma de decir que no nos han vencido…>[1]; esas fueron las primeras palabras que Viviana Alegre compartió ayer frente a la heterogénea multitud en la ex plaza Vélez Sarsfield, punto de llegada para dar lugar a un acto y un festival, a un año de la desaparición de su hijo, Facundo Rivera Alegre.
Cientos y cientos de personas vinculadas a la labor de derechos humanos, frentes políticos, y amigos, se fueron congregando, en efecto, en horas de la tarde, formando un cordón humano todo a lo largo de Colón y Cañadas hasta la plaza Marqués de Sobremonte, frente al Palacio de Justicia cordobés, con motivo de marchar por las calles y exigir, una vez más, que se haga justicia en la causa.

¿Dónde está Facundo?

Facundo Rivera Alegre cumple este año sus 21.

Y ayer, 19 de febrero, se cumplió el primer aniversario de su desaparición. No hay noticias de su paradero desde entonces, cuando lo vieron por última vez en una parada de colectivos, a la salida de un recital de Damián Córdoba que actuó esa madrugada de domingo en el Club del Centro.

El joven Rivera Alegre tiene una hija y una compañera, con quienes proyectaba construir un hogar; su familia se compone, además, por su madre, un hermano y su padre, estos últimos viviendo fuera del país[2].

Durante el primer semestre de la investigación -que se encuentra en la Fiscalía Nº 5, Distrito 1, a cargo del Dr. Alejandro Moyano-, la familia no pudo tener acceso a la causa,

<…ya que, el código de procedimientos de la provincia, establece el secreto de sumario hasta tanto haya un imputado. Debido al no acceso de información respecto a la investigación que se estaba desarrollando, ni la familia ni el abogado de la familia tuvieron posibilidad de conocer si los elementos probatorios aportados durante ese tiempo eran tenidos en cuenta o no…>[3]

Tiempo después, mediante acciones legales en el marco de la causa, el abogado de la familia, Claudio Oroz, solicitó el levantamiento de sumario de manera de poder tener acceso y saber cuál era el estado de la investigación.

Más allá de esto, en la actualidad, parece no haber nada en concreto. Días atrás, en una entrevista realizada por un medio local la madre del joven, sostuvo lo siguiente, frente a la pregunta del periodista respecto de si su hijo se encontraría con vida o no, luego del tiempo transcurrido:

<…No. A Facundo lo mataron. Lo mató la Policía. Pero lo voy a seguir buscando. Quiero encontrar por lo menos un hueso de mi hijo. Pese a que no creo que lo vaya a encontrar con vida, mi cabeza rechaza la idea de que no lo vuelva a ver nunca más…>[4]

Desde un principio, Viviana sostiene que a su hijo lo desapareció la policía, debido a que, entre otras cosas, relató que, constantemente, su hijo era amedrentado por efectivos policiales.

<…Yo no sé [donde está mi hijo], pero la Policía sí, y no lo quiere encontrar porque el cuerpo va a hablar y va a delatar a muchos. Algunos testimonios dijeron que a mi hijo lo mataron. Para mí lo quisieron asustar y se les fue la mano. Lo golpearon de más y lo mataron. Para los investigadores todo sigue igual como al comienzo. Estamos en foja cero. La idea es desgastarme y dejar de buscarlo…>[5]

En relación a la tesis sostenida por la madre del joven, es menester señalar que existe en la ciudad de Córdoba el Código de Faltas reglamentado mediante ley N° 8431,

<…una normativa muy criticada en la provincia por los defensores de derechos humanos que sostienen que criminaliza a la juventud, ya que son quienes sufren en carne propia la aplicación de esa normativa...>[6]

En este mismo artículo referenciado, publicado en Revista Veintitrés, se dan más detalles vinculados a dicho Código:

<…Las últimas cifras, de 2010, indican que el total de detenciones por el Código de Faltas informadas por los distintos departamentos  de la provincia ascienden a 54.223. Un 44% son jóvenes  de entre 18 y 25 años; 8% de entre 26 y 35 años; más de 45 años el 17, 4%, de 36 a 45 años el 8,7%; y menores de 18 años el 5,2%. De acuerdo con la Campaña Nacional contra la Violencia Institucional “cada 10 minutos se llevan a un pibe detenido por el código de Faltas>[7]

Los datos son alarmantes. Pues, la vigencia de este Código y lo que el posibilita es otorgar cierta autonomía en el accionar policial criminalizando mayormente a los jóvenes de sectores populares que no pueden circular libremente por la ciudad, siendo con frecuencia discriminados y estigmatizados.
Y este modus operandi se agrava al haber complicidades desde los distintos estamentos del Estado que, en innumerables oportunidades, se erige en productor de disimiles hechos de violencia –no solo física- que, por el contrario, es lo que debería tratar de contrarrestar.
En este sentido, como lo han señalado distintos cientistas sociales[8], al menos para el caso argentino, al tratar de pensar y analizar hechos de violencia se hace pertinente incluir y pensar al estado, en este caso provincial,  como productor de variados modos de violencia, y no solamente como la institución, o serie de instituciones que bregan para prevenir tales acontecimientos.

En vinculación con lo anterior, durante su alocución el día de ayer, Viviana Alegre sostuvo lo siguiente:

<…desde la familia de Facu, a un año de no tenerlo con nosotros, quisiéramos poder decirles al menos que hay avances, que se ha investigado el hecho y se lo ha buscado; pero no, no hay nada; solo más mentiras y más dilaciones. El gobernador no solo que hasta la fecha no nos ha recibido, siendo el responsable máximo de que exista un desaparecido en Córdoba, y quien debería dar las explicaciones correspondientes a la familia de porqué una persona puede estar desaparecida durante un año,  sino cuenta con el apoyo del poder político…>

Y, seguidamente, señaló:

<…esta policía cordobesa es responsable por acción u omisión de que no sepamos nada de Facundo, por ende es el gobernador de la provincia de Córdoba el que debe darnos explicaciones de lo que pasó con mi hijo…>[9]

Frente al encono generalizado y la tristeza inenarrable de su madre y familia, queda, al menos, la certeza comprobada de que frente a hechos deleznables como lo que presenciamos (llegando al punto de la desaparición de personas en democracia), distintos sectores de la sociedad y frentes políticos, con una importante participación juvenil, se unen en exhortación unánime hacia el respeto de la personalidad humana y, por lo mismo, al  repudio de cualquier forma de avasallamiento de los derechos sociales.

En este orden de cosas, estuvieron acompañando en este año cumplido de caminar las calles y abrazar la vida varias organizaciones: El Colectivo de Jóvenes por sus Derechos, El movimiento Evita, La Bisagra, HIJOS, Jauretche, La Cámpora, Kolina, MST, Partido Nuevo Encuentro, Polo Obrero, El Partido Comunista, Partido por la Liberación, Kapiango, entre otros.

Asimismo, legisladores provinciales y artistas locales hicieron llegar su acompañamiento en innumerables oportunidades.

El caso lejos está ya de borrarse de la memoria de los coterráneos cordobeses y traspasa las fronteras territoriales a través de las redes sociales e internet.

Cabe señalar también que es un caso que se suma a otros análogos acurridos en distintos puntos del país: el caso de Luciano Arruga[10] en Lomas del Mirador, partido de La Matanza, el del agricultor Mario Golemba[11] en la provincia de Misiones, o los asesinatos de Adrián Rodríguez, Jeremías Trasante y Claudio Suárez[12] en Rosario; todos jóvenes desaparecidos o asesinados en los que habría injerencia de las fuerzas de seguridad.

Viviana Alegre, con inefable dolor, sostuvo:

<… Soy una madre que lo único que quiere es saber donde está su hijo, necesito saber que han hecho con él, no voy a bajar los brazos, y voy a llegar hasta donde me de el cuerpo en esta búsqueda. Haré hasta la imposible por encontrarlo y encontrar a los que me lo arrebataron a mi hijo. Realmente lo necesito a mi hijo, hoy más que nunca…, hoy ha sido un día muy complicado para mí, desde esta mañana, todos los días… su familia lo necesita>[13]













[1] Palabras compartidas por Viviana Alegre durante el acto en la ex plaza Vélez Sarsfield, realizado ayer, en conmemoración del primer aniversario de la desaparición de su hijo. 19/02/2013

[2] Informe: Caso del Joven desaparecido en Córdoba Facundo Rivera Alegre, “El Rubio del Pasaje”.

[3] Ídem.

[4] “A él lo mataron, pero lo voy a seguir buscando”. La Voz del interior. 16/02/2013. http://www.lavoz.com.ar/noticias/sucesos/lo-mataron-pero-voy-seguir-buscando
[Último acceso: 20 de febrero de 2013]

[5] Ídem. El agregado entre corchetes es nuestro.

[6] La maldita cordobesa, por Tomás Eliaschev. Revista 23. Época II. Año 14. N° 762. 7/02/2013. Pp. 20 – 23.

[7] Ídem.

[8] Entre otros: Isla, A; Miguez D. (2003) Heridas Urbanas. Violencia delictiva y transformaciones sociales en los noventa. Buenos Aires, Argentina, Editorial de las Ciencias.

[9] Palabras compartidas por Viviana Alegre durante el acto en la ex plaza Vélez Sarsfield, a propósito del primer aniversario de la desaparición de su hijo 19/02/2013.

[10] A propósito de la Jornada cultural llevada a cabo a cuatro años de la desaparición de Luciano, La cooperativa de comunicadores sociales Lavaca, informó lo siguiente, y comparte, en su sitio web, un breve audiovisual alusivo: <Un enorme festival se realizó en Lomas del Mirador para recordar los 4 años de la desaparición de Luciano Arruga. Estiman una participación de alrededor 5 mil personas> Véase: La lucha que no arruga. Cooperativa Lavaca http://lavaca.org/notas/la-lucha-que-no-arruga/ 31/01/2013. [Último acceso: 20 de febrero de 2013]

[11] Mario Golemba, un misionero desaparecido en democracia. Complicidades políticas e impunidad. Por Sergio Alvez. Publicación especial de Revista Superficie. Año 2, N° 4, Posadas, Misiones, noviembre de 2012. 

[12]  Triple crimen en Rosario: existió complicidad policial. Publicado en el sitio web de la Campaña Nacional Contra de la Violencia Institucional. http://www.contralaviolencia.com.ar/index.php/noticias/item/32-triple-crimen-en-rosario-existi%C3%B3-complicidad-policial  03/12/2012 [Último acceso: 20 de febrero de 2013]

Es pertinente señalar que dicha campaña se lanzó, en parte, motivada por la creciente seguidilla de situaciones como las mencionadas. Se han venido incentivando acciones conjuntas entre distintos organismos de derechos humanos, y  de la sociedad civil, todo lo cual ha confluido en esta iniciativa. El lanzamiento de la misma en la provincia de Córdoba, se realizó el pasado 9 de octubre de 2012 en el auditorio de la Asociación Cultural Israelita Argentina (ACIC) y contó con una nutrida concurrencia de integrantes de distintos frentes políticos donde se visibilizó una importante participación por parte de los jóvenes. Los panelistas que estuvieron durante el lanzamiento fueron la Rectora de la Universidad Nacional de Córdoba  Carolina Scotto, los diputados Leonardo Grosso y Horacio Pietragalla, y Viviana Alegre. En la ocasión, se anunció además la presencia del titular del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) Horacio Verbitsky, quien finalmente no estuvo presente. Más información en:

Puede verse el spot sobre la Campaña en: http://www.youtube.com/watch?v=dHGkq-NK7R0 [Último acceso: 19 de febrero de 2013]

[13] Palabras compartidas por Viviana Alegre durante el acto en la ex plaza Vélez Sarsfield, a propósito del primer aniversario de la desaparición de su hijo 19/02/2013.